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miércoles, 2 de octubre de 2019

Dependencia económica y fobia social





Hoy escribo una entrada difícil para mí, esta es la razón por la que escribo con el pseudónimo Laine Lois , la vergüenza me puede , con fobia social todo es así, pero este tema en particular es más delicado.No obstante tengo que tratarlo para que se vea lo duro que es vivir con fobia social.

La dependencia económica : Yo dependo de mi marido 

Tengo 20 euros en mi cartera, no necesito más.Le pido dinero a mi marido , me dice:
  • Toma , te vale con 10 euros?
  • Sí ,
¿Qué le voy a decir? Como digo,  no necesito más.
El está ahí siempre para pagar lo que compremos o consumamos, no  obstante a mi me gustaría tener entre 50 y 70 euros , un poco como mi tranquilidad psicológica, no lo necesito , pero qué menos que tener algo así.
Bueno esta es la diferencia entre la dependencia y/o el libre albedrío que una persona dependiente nunca podrá tener.
El  sabe que tengo una tarjeta solo mía unos pequeñitos ahorros recogidos cual hormiguita a lo largo de toda mi vida , eso también le da la tranquilidad de que tengo para emergencias. 
50 euros  para un regalo de cumpleaños, cuando trabajé en Francia, hablo de ello en este blog etc.. irreductibles como las Galias de Asterix y Obelix forman parte de  mi estabilidad emocional un dinero solo mío del que no tengo que dar cuentas a nadie, eso me hace sentir bien,  y del que poder disponer en caso de mucha emergencia.

¿Para qué son esos 20 euros pues? bueno además de por tener algo ( todo hay que decirlo tenía más cuando la que compraba era yo, pero ahora él es quien cocina y compra cosas que agradezco porque por mi pasada anorexia odio cocinar los olores y todo, además sigo muy debilitada por mi enfermedad ) bueno pues los tengo para tomar un café pej con el GAM de AMTAES, de sobra ¿ no? y  no tengo más gastos.
A veces el me los pide cuando no tiene cambios o billetes pequeños y vuelta a empezar 🙄

Los caprichos tengo que pedirselos, no puedo comprarlos yo con 20 euros  , si veo algo  y el no está tengo que decirle,  él viene conmigo y lo compra, pero lo normal, en nuestro caso ,es que estemos juntos , él ahora está jubilado de forma anticipada y vamos juntos a todas partes. Esto es un ej de la incomodidad o perjuicios de la dependencia, otro es que el que paga manda , pueden pedir tu opinión ,pero normalmente  la última palabra siempre la tiene quien tiene el dinero 

Algunas parejas - familias escogen que la madre se quede en casa y el padre trabaje, cada vez menos eso sí, porque lo ideal no es quedarse en casa salvo en caso de suma necesidad pues hay que pensar también en nuestro futuro nuestra jubilación etc pero si así se decide se vive con naturalidad,  no hay culpas ni vergüenzas cada uno hace su función. El problema es cuando tienes un trastorno o problema , en este caso de ansiedad social, ya en tu cabeza tienes puesta esa culpa de tu trastorno que te limita casi constantemente y no te deja hacer muchas cosas, esa inseguridad , además en este caso  no hay impedimento físico que te impida trabajar, ni hay una necesidad de que te quedes en casa para cubrir otro papel ,podrías trabajar, deberías trabajar.Todo esto causa gran sufrimiento como en todo con fobia social, las limitaciones, la culpa ... 

PEDIR
Es lo peor de la dependencia económica tener que pedir, personalmente me ocasiona mucha vergüenza y hasta culpa , procuro sea cuantas menos veces mejor por eso también preferiría tener cantidades más grandes a 20 euros y así tardar más en necesitar .
Un día por esa violencia del pedir en lugar de decir:
- ¿Me das ?
Le dije:
¿Me dejas?
Otra forma de pedirlo que se suele decir , pero él me contestó:
¿Cómo que me dejas? , ¿Me los vas a devolver? me dijo sonriéndo con sorna. 

Yo me sentí bastante humillada y avergonzada, ahora cada  vez hago el esfuerzo de pedirlo con un ¿Me das? y me cuesta mucho. Estas cosas pueden pasar cuando eres dependiente.
Tengo que decir que no me falta de nada y  que estos  sentimientos, de culpa, vergüenza,etc solo son consecuencia de mi dependencia, de mi decisión y que yo me lo tomo así, como decía ,quizá debido a mi fobia social.

¿MERECE LA PENA?
Nunca debería merecerla  , yo no deseo esto, aunque sin duda viva feliz sin trabajar y a mi si me lo merezca , pero nunca será la opción mejor ni deseable para mi  estabilidad emocional en muchos casos, dependencia, autoestima..etc  , todos ahora me instarían a que intente trabajar, pero ahora explico la otra cara: mi último trabajo que fue dentro de mi matrimonio y por tanto hubiera sido colaborativo para la unidad familiar , más obligación si cabe si pej se necesitasen dos sueldos, ya no estás tu solo

ASESORÍA
Fue en una asesoría lugar al que se orientaban mis estudios universitarios  el tema laboral, nóminas, altas y bajas, contratos etc  Entraba para sustituir a una chica embarazada ,su baja maternal. Aún no estaba de baja pero la quedaría un mes o así, en ese tiempo debía enseñarme lo que debía hacer .Mientras ella hacía su trabajo a mi me dieron la labor de ingresar unos datos en el ordenador para las chicas que hacían las declaraciones de hacienda, al ser época de declaraciones iban muy justas de tiempo  y también poner en orden las facturas y  registros de años atrás, esas cosas que se van dejando por no tener tiempo ni personal .
Estaba aterrorizada no me veía capaz de en un mes aprender todo aquello .Me hizo hacer un ej de baja laboral y alucinó no tenía nada que ver con lo que se hacía allí , yo aún no había ejercido mi profesión y no tenía nada que ver con lo que hacíamos en la universidad,  para empezar ellos utilizaban el  ordenador .
Venía cada día a trabajar empastillada , recuerdo la puerta de la oficina eran de esas altas y grandes , aún me veo delante de esa puerta llamando al timbre , la tremenda sensación mientras esperaba  y cuando esta se abría , como si el mundo se parase, entonces entraba, pero dejaba fuera parte de mi alma , ya no era yo, sino un ser automatizado. Me sentaba en mi ordenador y no me levantaba en toda la mañana, ni para ir al baño  . Las chicas a veces se tomaban un café ahí mismo en la oficina  , yo no hubiera sido capaz de andar el corto trayecto hasta donde estaban , me hubiera caído, las piernas no me respondían, tampoco hablaba con las chicas de la oficina salvo un mínimo con la embarazada que estábamos juntas , ella me trajo el café alguna vez.
A media mañana llegaba la jefa  nerviosa y dando órdenes siempre, era abogada y preparaba cosas que pedía a su secretaria que la traía loca, pero se paseaba por toda la oficina con esos nervios y yo estaba cagada, tensa como un palo e intentando centrarme en mis quehaceres para que me viera ocupada y no tuviera queja. En realidad nunca dejaba de estar tensa , incluso con el tranquimazin que me tomaba cada mañana, aunque dese luego el tranquimazin ayudaba
Cuando se acababa la jornada, solo trabajaba de mañana,  sentía un gran alivio, pero duraba muy poco porque me pasaba el resto del día  pensando en el día siguiente, a veces acurrucada en la cama ida, pensando también en que no sería capaz de aprender mis quehaceres en ese tiempo , además era un trabajo con muchos supuestos e imprevistos posibles era imposible saberlos todos e imaginarme sola sin tener si quiera a quien preguntar me daba terror  , otras me las pasaba llorando , para volver al día siguiente y enfrentarme de nuevo a esa puerta. Era como si solo viviera para esa puerta terrorífica
Al final les dije que no me veía capaz de sustituir a la chica y que me iba, me pidieron que acabara el mes con las actividades que hacía hasta al momento  , como parte de mi tensión se liberaba al no tener que sustituir a la chica les dije que sí , pero los problemas siguieron. A veces me mandaban a recados, dejar declaraciones en bancos, ir al INEM a dejar contratos... cosas que ya me causaban zozobra aunque agradecía mucho poder salir de la oficina…
Otro de esos encargos fue ir a comprar unos sellos , me dejaron el dinero, pero no me llegó y puse del mío uno o dos euros.No dije nada a nadie me dio vergüenza pedirselos. Se me ocurrió comentarselo a mi marido que me echó una bronca monumental y me instó a que lo dijera en la oficina y que si no lo hacía yo ,  lo haría él  
- que no, que nooo... Ahí yo llorando como una Magdalena ...imaginad si ya sería una vergüenza para alguien con fobia social reclamar un derecho ,  que vaya tu marido a pedirlo , la vergüenza seria como para no levantarse en la vida.Total que tuve que hacerlo ya había pasado un día o dos yo no sabía cómo iban a entender que hubiera esperado tanto en decirlo, me moría de la vergüenza y ansiedad , pero lo tuve que decir y por supuesto me devolvieron los euros con total naturalidad en contraposición a lo que mi cabeza tenía , no lo podía ni creer.
Todo era así conmigo, acabé el mes como pude y ya no volví a trabajar nunca  nunca más.

Mi propio marido me dijo que ya no haríamos más intentos que no podía verme todo el día sufriendo y empastillada, evidentemente yo vi el cielo abierto.No es lo mismo que tu digas que no trabajarás más, de hecho yo lo hubiera seguido intentando por esa culpa aunque acabara mal cada vez ( al menos eso creo, desde la distancia se dice fácil) y mi deseo fuera dejarlo para siempre , pero el que te digan que no lo hagas...es un alivio, te quita la culpa como mínimo.
Me dijo que con sus medios nos manteníamos los dos de sobra y que la única "necesidad" de trabajar yo era la de mi propio beneficio y futuro, para una jubilación pej.. lo cierto es que ya llego tarde para eso apenas habré cotizado 3 meses en toda mi vida y no me dan los años para cotizar, a lo sumo puedo optar ,si no cambian las leyes que es posible dados los tiempos que corren, que ya ni la jubilación  se garantiza ,.... a una pensión de viudedad.No puedo dejar de comentarlo porque mi decisión de no trabajar  obviamente hace que me preocupe por mi futuro , otro sufrimiento más y no puedo hacer nada por evitarlo.Ya esta hecho.

¿Que hubierais hecho los que tenéis esta especificidad de fobia social? ¿ Habriais dejado de trabajar con las facilidades que os daban o lo hubierais seguido intentando?
Realmente para mi eso no era vida 


DISCAPACIDAD
No obstante la fobia social crea gran discapacidad en esta entrada:  La fobia social es discapacitante.
explico en qué me discapacita a mi y me pregunto:
¿No debería tener la fobia social una invalidez permanente en el mundo laboral?


A continuación  enlace que resume muy bien como se cataloga la discapacidad en enfermedad mental, incluidos los trastornos de ansiedad como la fobia social , y el baremo. Así como la norma que lo legisla por si queréis saber más



3 comentarios:

  1. Por supuesto que hubiera dejado de trabajar. Llevo trabajando 16 años como puedo, he estado en muchos sitios diferentes porque me cuesta muchísimo mantenerlo, y todo sigue igual de estresante que en el primer sitio al que entré. No ha cambiado nada. Ese momento insufrible hasta que llegas a la puerta, saludar a todo el mundo, los temblores no desaparecen... Mucho miedo todos los días.
    No te sientas mal, para nada, disfrútalo, no te pierdes nada ;)

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  2. Yo dependo de mi pareja, que es la que corre con todos los gastos, y de mi familia, que me dan cada mes algo para que aporte a los gastos comunes (apenas la mitad del alquiler) y algo para mí, unos cien euros que me administro como puedo para pagar teléfono y bonobús, pues estoy estudiando. Me cuesta mucho también y te entiendo en parte, a mí también me aterra no llegar a salir nunca de esta situación.

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  3. Vos por lo menos dependes de tu esposo, yo con casi 30 años, siendo hombre soy mantenido por mis padres. Y ademas nunca trabajé

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