La escopofobia, es un trastorno de ansiedad caracterizado por un miedo a ser visto o mirado por otros.
Algunos profesionales consideran que la escopofobia puede ser tratada directamente como una fobia en sí misma y otros consideran que es un síntoma de otra fobia , así pej la fobia social podría tener la escopofobia como síntoma
En la entrada en este blog : Algo más que evaluación negativa ya comentaba la importancia o como nos podía influir a personas con fobia social , al menos a mí, ese sentirse observado y que no todo era miedo a una evaluación negativa, al menos no de esa forma tan extrema , hasta el punto de definir la fobia social tan simplemente como ”Un miedo a la evaluación negativa “ explicaba que pej también lo era para una evaluación positiva y que estaba el hecho de no soportar sentirse observado, así sin más , para bien o para mal.
De hecho yo le veo más sentido a esta variable de sentirse observado cuando leo los listados respecto a algunas de las situaciones que pueden generar ansiedad en personas con fobia social pej cuando se habla del miedo a que te vean comer , firmar o escribir en público...
Porque.. ¿Qué puedes hacer mal o bien ahí para temer una evaluación negativa o positiva en definitiva?
Lo que realmente se ve ahí, a mi entender , es que no soportas que te miren, te incomoda fuertemente sentir que te están observando mientras haces algo o incluso sin hacer nada de nada.
Hablo en esa entrada también de que en muchos casos por genética nuestro mecanismo de alarma ante lo social es más sensible y que realmente en mi caso pej yo no soporto que me miren o reparen en mí, me crea gran violencia .
La escopofobia también puede estar asociada con un miedo patológico de llamar la atención sobre uno mismo.
Explican que ésta generalmente surge por vivir algo traumático pej una mala experiencia en público o pej que tengas una deformidad o algo físico destacable .
También en la fobia social señalan que, incluso teniendo una predisposición genética, tiene que haber un desencadenante o mala experiencia vivida.
(Aunque como siempre digo de mi caso , primero fue mi miedo o timidez y después las experiencias desagradables por ese motivo, sin que hubiera escarnio público ni trauma anterior, salvo mi propia incomodidad de exposición primigenia ).
Anécdota sobre esa gran incomodidad al sentirme observada.
En mi caso ya existía a edad muy temprana, antes de que lo que me pasase tuviera un nombre. Por entonces era algo interno que llevaba ahí oculto.
A veces en clase salía a la pizarra para hacer algún ejercicio o exponer alguna cosa , por supuesto esto era algo terrible cuando sólo la posibilidad ya me daba terror, en este caso sí podía ser evaluada o tener miedo a quedar o hacer algo mal, porque el profesor te sacaba para someterte a un ejercicio o prueba y existía esa posibilidad de quedar en evidencia .
Esta situación es algo que ya he explicado en varias ocasiones y que viven o han vivido, o quizás yo diría sufrido, muchas personas con fobia social , pero otras veces podía salir ahí y no tener que hacer nada ni ser necesariamente el centro de atención, porque fueran otros de mi grupo de trabajo quienes lo hicieran o por lo que fuera. Y aún así el simple hecho de estar ahí visible me resultaba tremdamente violento, lo mismo que, desde mi pupitre , cuando me hacían levantar para lo que fuera, pej presentarme, decir presente o simplemente levantar la mano cuando pasaban lista. El hecho de que repararan en mí por un sólo segundo , me ponía fatal, violenta y tremendamente tensa.
Lo que no sabía cuando escribí aquello en el blog es que existía la escopofobia , ese miedo a ser mirado, como un fobia específica y que al tiempo ésta pudiera ser también fobia social. Es decir que cayera en ambas categorías.
Así como la eritrofobia vendría a ser una fobia específica dentro de la fobia social.
(La Eritrofobia es una fobia específica que se encuentra dentro del grupo de las fobias sociales)
PSICOANÁLISIS
Una teoría interesante que he leído al respecto de la escopofobia es la psicoanalista de Sigmund Freud.
Ellos vinculan a la escopofobia con un (reprimido)miedo de mirar y también a una inhibición de exhibicionismo.
Siendo la vergüenza la fuerza motivadora.
En realidad esa necesidad que tengo de hipervigilancia con mi entorno choca con ese miedo a la vez de mirar , como si sólo el hecho de mirar y toparme con la mirada de otro fuera un peligro , un posible motivo de agresión a mi persona . Por supuesto soy todo lo contrario a una exhibicionista que no existe ni en mi intimidad…y respecto a la vergüenza yo era, y soy , la reina del “Me da verguenza” ,es un continuo , incluida la ajena , el colmo ya de las vergüenzas.
SOBRE LA VERGÜENZA AJENA
Ahora al pensar y buscar sobre el porqué de la vergüenza ajena me encuentro con que hay estudios que demuestran que, ante alguien que pone en peligro su dignidad, ante esa vergüenza ajena de verlo, se nos activan las mismas estructuras corticales que cuando sentimos compasión por el dolor del prójimo.
Se trataría de una vergüenza empática, sintiendo empatía por esa persona que puso en peligro su integridad
En la fobia social la hipersensibilidad , empatía etc son unas variables con mucho peso , por si ya fuera poca una empatía afectiva , sumarle el de la vergüenza ajena podría ser el colmo.
Además de ese miedo a ser mirado por otros , también tenemos un problema a su vez para mirar a los ojos
¿POR QUÉ NOS CUESTA TANTO MIRAR A LOS OJOS ?
Es bastante conocido y común que a las personas con fobia social les cuesta, en una conversación, mirar o ser mirado a los ojos, pero hay que decir que a veces también es difícil sentirse así sin tener este problema, con lo que se podría llegar a entender el plus de complicación que tiene una persona con fobia social.
La cara, pero sobre todo los ojos , la mirada, es la parte de nuestro cuerpo que más expresa nuestras emociones, de hecho la mirada expresa prácticamente todas las emociones incluido el miedo, hasta el punto que puedes llegar a saber o intuir qué está pensando el otro.
Una prueba pej es que cuando escribimos por internet sin vernos , muchas veces utilizamos los emoticonos para expresar nuestro sentir, porque con las solas palabras, en este caso escritas, se nos escapan las emociones .
Al no estar cara a cara no podemos interpretar o tener esa información extra del lenguaje no verbal.
Los ojos reaccionan de una forma muy sensible con la parte del cerebro relacionada con los sentimientos , por eso se suele decir que los ojos son el espejo del alma.
Cuando alguien nos mira directamente podemos sentir vergüenza y por ello apartar la mirada, como en un intento de escapar de esa insoportable violencia porque en el fondo sabemos que están o pueden estar viendo más allá de nuestros ojos.
Así es que aprendemos a desviar la mirada como estrategia para no dar demasiadas pistas sobre nuestra interior.
En mi caso es cierto que me causa violencia , pero más que por mirar a los ojos del otro que lo puedo hacer de forma normalizada y disimulada sin que se entere ... , por ser mirado .
Me cuesta tolerarlo cuando hay un fuerte y directo cruce de ellas, pej en una conversación a dos que es más complicado ese disimulo y que la norma es mirarse (no vas a mirar al suelo mientras hablas ) .
En el caso que no sea tan directo porque pej seamos un grupo y no siempre se crucen miradas , yo sí escudriño al otro mirándole a los ojos o a la cara, porque me da mucha información y me indica si es de fiar, si tengo que tener miedo, si me inspira confianza, si tiene un rostro amable.. etc . por supuesto me puedo equivocar , pero de entrada me tranquiliza o me pone en alerta según sea.
Cuando me preguntan ,cuál es la parte en la que más te fijas de otras personas siempre respondo:
Los ojos
ESTUDIOS
- Evolutivamente existe un instinto estudiado de sentirse observados que nos mantiene alertas y listos para actuar.
Desarrollo del estudio:
“ Se les pidió a unos voluntarios que determinaran la dirección en la que unos rostros miraban sin estar claro a dónde dirigían los ojos. A pesar de la ambigüedad, los participantes sintieron que estaban observándolos a ellos”
Un estudio , realizado en la universidad de Tokio, sobre la incapacidad de mirar a los ojos demostraría que no esquivaríamos la mirada del otro para ocultarle nuestros expresiones y sentimientos, sino que lo haríamos para evitar que gran parte de nuestra atención quede en su mirada y nos impida cumplir con nuestro cometido de forma satisfactoria.
Desarrollo del estudio:
“Se reclutó a una serie de personas voluntarias y se les propuso realizar una tarea de asociación de palabras. Lo curioso era que al realizar esta tarea mirando fijamente a los ojos de una persona cuya fotografía era proyectada ante ellos, su rendimiento caía significativamente , a pesar de no conocer a estas personas de nada ni tener que interactuar con ellas más allá de mantener la vista fija”
Vendría a decir que el hecho de mirar a alguien a los ojos es una actividad que requiere que una buena parte de nuestro cerebro se concentre en ella. Procesar la información de la cara del otro nos haría usar muchos recursos de nuestro cerebro y nos volvería incapaces de hacer otras cosas como pej mantener una conversación.
En otro curioso estudio psicológico con respecto a la mirada realizados por un investigador italiano se encontró que mirar a otra persona continuamente a los ojos puede inducir un estado alterado de conciencia, similar a lo que sucede cuando se consumen ciertas sustancias psicoactivas.
Desarrollo del estudio :
“Se puso a 15 parejas en una habitación mirándose frente a frente a los ojos con 1 metro de separación entre ellas para ver el efecto que causaba.
(Para confirmar que eran los ojos, y no simplemente el quedarse mirando sin más, hicieron una prueba similar mirando a una pared en blanco el mismo tiempo. Sin embargo, esto no provocó ninguna clase de reacción alucinógena como en los otros casos)
Otro experimento consistió en que algunos participantes miraran fijamente su propio rostro en un espejo, enfocándose en sus ojos.
En todas las pruebas el tiempo de cada sesión era de 10 minutos de observación sostenida .
Los resultados fueron que un 90% sufrieron alucinaciones con la deformación del rostro que tenían enfrente (propio o ajeno) y 75% con figuras monstruosas que parecían surgir de la nada y enfrente suyo.
Muchos también dijeron sentirse “desconectados” de la realidad o abandonados en una especie de vacío
Esta perturbación no sólo es nuestra , sino también del otro”
RESPECTO A LA FOBIA SOCIAL
Si ya existen estudios que muestra esta relación y dificultades con la mirada, con fobia social es más complicado, las personas ya nos causan ansiedad - miedo por sí mismas.
Sabemos pej que nuestra cara puede resultar todo un poema difícil de esconder.
(Nosotros sentimos como fruncimos el gesto , como nos tensionamos, nuestros ojos fácilmente pueden estar mostrando , sufrimiento ,alegría, angustia , miedo, enfado, sorpresa, .. )
Por todo esto nos cuesta más sostener las miradas , para no mostrar eso que sentimos que nos hace sentir vulnerables y expuestos .
Como consecuencia dejamos de ser naturales y espontáneos porque al centrarnos en todo nuestro interior y el querer ocultarlo evitando miradas , se crea una desconexión que sabemos es detectada por el otro y eso nos bloquea aún más , sumándose cada vez más motivos para intentar que la otra persona no sepa lo que pasa por nuestra mente
Las caras que ponemos son una realidad:
Recuerdo un día , en que me tocó pedir la cuenta levantándome de mi mesa y acudiendo a la barra. Estaba totalmente azorada y hasta asustada, mi cara lo debía reflejar, bueno sin duda lo reflejaba..
Me planto ante el camarero que al verme y cruzar miradas , él , con otra cara igual de expresiva que interpreté de gran preocupación , me dijo alarmado :
Entonces me la dio y su rostro se relajó.
Debió ver en mi cara tal cara de susto que interpretó que me pasaba algo grave . Ni yo sabía que iba mostrando tan claramente mi interior y me quedé sorprendidísima
En muchas situaciones nos entra una necesidad como de no ser , de no querer estar , que viene a ser esa sensación que tenemos en muchos momentos de querer o desear ser invisibles
Por otra parte si ya sólo concentrarse en la mirada de otra persona nos hace utilizar muchos recursos de nuestro cerebro como dice el estudio japonés , con la fobia social y la violencia que esto nos causa , aún nos puede dejar más incapacitados para salir airosos en una conversación o simplemente aguantar la mirada
Según el estudio del investigador italiano , la mirada tendría un gran poder.
Personalmente he hecho ese experimento , cuando miro mi rostro fijamente durante unos minutos en el espejo , sufro fácilmente una despersonalización . Veo la imagen del espejo como algo ajeno a mí , un cuerpo inerte y desprovisto de mi yo.
El chocarse las miradas con desconocidos por la calle , que es un instinto evolutivo automático en todos, nos enfrentaría a ese poder por unos segundos al menos , la suma de miradas , en personas con fobia social, me aventuro a decir sin tener idea , podría ser la razón que nos hace cohibirnos de esa manera , junto a esa sensibilidad que siempre apunto tenemos , podría ser una razón más, para sufrir fobia social.
En mi caso las despersonalizaciones son un síntoma que se repite cuando estoy con gente desconocida o cuando paseo por la calle o me enfrento a cosas que me dan miedo.
Quizá me lleva a la despersonalización el hecho de la gran ansiedad que me causa tener una alta conciencia de mi ser individual y autónomo , que me hace ser más consciente de mi inmensa vulnerabilidad y que combato inconscientemente, sin buscarlo , saliéndome de ese cuerpo para protegerme . Ese nivel de conciencia especial de existencia de mi cuerpo se produce , en definitiva viendo gente, chocando miradas, etc..
Lo que está claro es que la mirada , sentirse observado , nos puede influir fuertemente, como he explicado según estudios y se convierte en una variable muy importante a tener en cuenta, en mi opinión, junto a nuestra especial sensibilidad, de que la fobia social fácil y realmente es algo más que miedo a la evaluación negativa